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Writer's pictureDra. Emilia Concepción, PhD, PCC

El Efecto de Tus Emociones


¿Qué hay dentro de tu Taza?

Todos nos hemos identificado con los terremotos ocurridos en enero del 2020 en el área sur de Puerto Rico. Si alguien me hubiera preguntado cómo empezaría el nuevo año, esto no hubiera estado en mi lista. Sin embargo, aquí estamos.


He tenido la oportunidad de proveer apoyo a empleados y sus familiares desde que comenzaron los temblores. Les aseguro que lo que vivimos en otros lares, lejos de área sur, lo que ellos estan experimentando es mucho más intenso. Aún como psicóloga ha sido retante mi manejo emocional. En Yauco y Ponce y pueblos limítrofes, todo retumba más fuerte. Para los que han tenido pérdida material, y situaciones difíciles, mi solidaridad para con ustedes.


Lo que sientes y cómo actúas es el resultado p producto casi exclusivo de tus pensamientos. Aunque es natural que actives emociones de incertidumbre, ansiedad y preocupación, es relevante que conozcas que tu ansiedad es producto de las cosas que desconoces. Y ante lo desconocido, por ejemplo: cuándo será el próximo temblor, dónde será, cuán intenso será, tiene exclusivamente que ver con tus pensamientos. Ni tu, ni yo o los científicos tienen respuestas precisas.

¿Cuál es el común denominador? Tus pensamientos. Esto es debido a todas las cosas que desconoces sobre el futuro. Esos pensamientos tienden a ser negativos, especialmente en situaciones retantes o difíciles. Le he comentado anteriormente: Nacimos alambrados en negativo, por tanto, te es cuesta arriba enseñar a realambrar tu mente para pensar en positivo. Ahora bien, te aseguro que la activación de cualquier emoción que sientas o actives, no importa cuál sea, NO CAMBIARÁ lo que va a pasar.

Por tanto, evalúa maneras más efectivas para trabajar lo que anticipas, de manera tal que puedas manejarlas lo mejor posible, especialmente porque no podrás controlar los resultados.

Recuerda que eres responsable no solo de ti, sino de otros. Busca la manera de restablecer tu oxígeno primero, ya que, de no estar vivo, o sano(a), no podrás ayudar a otros, porque NO puedes dar lo que ya no tienes.

Reguemos la voz con ideas positivas. Le deseo paz y bendiciones a todos, estoy aquí para ustedes, continuaré mi apoyo en el Sur, virtual o físicamente.


Artículo publicado originalmente en mi página de Dra. Emilia Concepción, PhD, PCC en Facebook.

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